Por circunstancias de la vida, conocemos a una persona muy famosa, de las habituales del prime time de Telecinco y de su programa estrella “Sálvame” (no vamos a dar más pistas). El aparecer de lunes a viernes más de cuatro horas en televisión irremediablemente convierte hasta a los personajes más serios en famosos, celebrities o como los queramos llamar.
Y en ese momento, estos personajes están totalmente expuestos a casi cualquier cosa en Internet. Porque ninguno se resiste a tener sus perfiles en redes sociales y a interactuar con su ejército de fans y con sus, también, detractores. Porque no todos somos dólar, “hoygan”, y a no todo el mundo les gustamos.
Pues bien, esta persona nos ha comentado, en más de una ocasión, la desesperación por las que los diferentes miembros del equipo pasan no cuando les insultan, porque ya están más que acostumbrados, sino cuando les amenazan. Y las amenazas parecen serias, son variadas y muy subidas.
Evidentemente, si alguien quisiera hacerles algo, ya se lo habría hecho. Es de primero de psicología: si vas a cometer un crimen, no vas a ir contándolo a todo el mundo. Sería insólito. Pero como de todo hay en este mundo, y nunca te puedes fiar, en más de una ocasión nos han confesado sentirse profundamente intimidados y preocupados por su seguridad y la de sus familias.
En este caso, como sucede en muchos otros sin que los implicados sean famosos, la vía que se debe utilizar es la legal: recopilar bien todos los hechos, certificar bien todas las pruebas digitales y denunciar.
Está claro que no por ello la Guardia Civil te va a poner una escolta (o sí, depende del caso), y el hecho de poner una denuncia tampoco te va a hacer sentirte más seguro. Pero es la única vía viable que tenemos para, entre todos, combatir los ciberdelitos.
Lo primero, es lo primero: créate un dossier con la máxima información posible. Saca copias en papel que prueben el delito (emails, contenidos web, tweets, post, etc.) y certifica dichos contenidos con eGmail o eGweb. El proceso es muy sencillo: cómo certificar el contenido de una web o cómo certificar contenido de Twitter (o de otra red social que sea pública).
Con toda esa información, debes personarte en un cuartel de la Guardia Civil, donde tomarán toda la información para cursar la denuncia, abriendo de esta manera el proceso. Si estás preocupado por tu seguridad, o la de tu familia, házselo también saber.
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